Skip to main content
Advertising

Derrota marca inicio de reconstrucción de cuadro ofensivo

La temporada de los Houston Texans ha llegado a su fin. La derrota de 34-16 en contra de los New England Patriots sirve para recalcar que los Texans, a pesar de contar con un cuadro defensivo de calibre de campeonato, tiene que mejorar de manera importante el rendimiento de su cuadro ofensivo.

El cuadro defensivo de Romeo Crennel jugó un gran partido por más de tres cuartos hasta que simplemente fue traicionado por sus mismos compañeros. Los errores del equipo simplemente se desbordaron para sumar un resultado final que miente en lo que fue un gran esfuerzo de Jadeveon Clowney, Whitney Mercilus y compañia. Primero en equipos especiales permitieron una devolución de patada de kickoff para TD de 98 yardas. Luego, las primeras dos intercepciones del partido lanzadas por Brock Osweiler le permitieron a los Patriotas mantenerse al frente. Claro que como siempre, no se trata de sólo los errores de Brock. El ala cerrada CJ Fiedorowicz soltó lo que hubiera sido un pase de TD que hubiera empatado el partido a siete en el primer cuarto y Houston sólo cobró un FG. Tarde en el tercer periodo en tercer down y ocho desde la 45 de los Patriots el novato Will Fuller soltó un pase preciso de Osweiler en la zona de anotación. Houston se hubiera acercado a 23-24 con todo el cuarto periodo por jugar. Al convertir una intercepción de Andre Hal un

par de series más tarde los Texans iniciaron el cuarto periodo con gol de campo para colocar el marcador 24-16. Sería lo más cerca que los Texans se encontrarían.

Los Patriots y Tom Brady se apoderaron del partido y con un cuadro ofensivo limitado sería imposible remontar. Esto es lo que los Texans tienen que encara en los próximos mese al preparar la siguiente temporada. La rehabilitación del cuadro ofensivo es la máxima prioridad.

Después del partido Bill O'Brien comentó acerca de que él tiene que hacer mejor trabajo como entrenador y reconoció la grandeza de los Patriots. Pero lo más obvio de todo es que la posición de mariscal de campo tiene que ser mucho más consistente y menos limitada. En varias oportunidades a lo largo de la temporada la posición de QB dejó jugadas en la cancha. En el segundo cuarto y con 4:11 por jugar contra los Patriots, los Texans tenían el balón en tercer down y tres desde su propia yarda 11. Brock tenía por el lado izquierdo a Hopkins corriendo trayectoria de escuadra hacía afuera para lograr el primer y diez pero descartó la trayectoria temprano en la jugada al no reconocer que el safety estaba fuera de posición para cubrir dicha trayectoria. El esquinero se había quedado corto para cubrir el costado y también estaba fuera de posición para cubrir a Hopkins. De hecho era la cobertura perfecta para lanzar ese pase y lograr el primer y diez. Del otro lado de la cancha Fuller, con marca personal y sin un safety en el centro de la cancha estaba completamente abierto en la trayectoria de poste. Un pase preciso, si es que lo atrapa Fuller, le daría oportunidad de mínimo llegar a la media cancha si no anotar. Brock al no reconocer la cobertura y posición de los safeties no trató de aprovechar para lo que hubiera sido posiblemente la ventaja de los Texans de 20-14. Con estas dos opciones en la misma jugada, Brock, a pesar de contar con una bolsa de protección limpia y sin presión, lanzó un pase corto que buscaba al ala cerrada novato Stephen Anderson en el centro de la cancha. Por suerte el LB Rob Ninkovich no pudo asegurar la intercepción. La jugada terminó en pase incompleto pero este tipo de situaciones han aquejado a Brock a lo largo de la temporada. Jugadas perdidas en el terreno de juego por simple incapacidad de anticipar coberturas y aprovechar lo que la defensa te estaba permitiendo.

Estas son lecturas básicas que un QB tiene que hacer de rutina pero esto es algo que para los Texans se  convierte en problemas de ingeniería química que parecen ser imposibles de resolver. La verdad es que hasta que esto se pueda superar y manejar con regularidad no va a importar el regreso de JJ Watt y Kevin Johnson para la temporada 2017. Brock va a estar en el plantel de los Texans en el 2017 salvo que suceda algo completamente no anticipado. La realidad es que aún no se sabe que se tiene en Tom Savage y el anticipar que un mariscal de campo novato que los Texans encuentren en el draft universitario sea la solución no es lo más probable. Lo de los Cowboys con Dak Prescott fue de suerte y nada más.

Lo más lógico en todo es de reconocer que salvo que cuentes con un mariscal de campo que se llama Tom Brady, el esquema ofensivo que cambia y se trata de adaptar semana a semana al rival, tiene que cambiar. Ningún QB en el plantel de los Texans tiene la capacidad y experiencia para lo que requiere este paquete ofensivo. Bajo la dirección de Brady es algo completamente distinto y este fin de semana lo hizo sin Rob Gronkowski y con Deion Lewis, un corredor que en la temporada no había anotado ni un sólo TD por tierra o en recepción. Pero en contra de los Texans Brady y el esquema encontraron la manera de convertirlo en la

Texans fans showed up at Gillette Stadium to support their squad in the Divisional Playoff game.

gran figura al agregar de pilón, un tercer TD en equipos especiales.

Este esquema no es el mejor para lo que tienen a su disposición los Texans. Después de tres temporadas con un cuadro ofensivo que consistentemente ha bajado en su rendimiento, esto queda clarísimo. O'Brien tiene que ser más flexible en lo que es su idea para este cuadro ofensivo. Se cuenta con un buen corredor, alas cerradas capaces de hacer jugadas y uno de los mejores receptores de la liga por lo tanto queda claro que la manera más inmediata de mejorar el rendimiento es cambiar el esquema. El continuar de la misma manera es simplemente darte de topes en la pared.

O'Brien confirmó de la manera más clara que a pesar de los rumores que han circulado por la NFL, él será el entrenador en jefe de los Texans en el 2017. Después de haber ganado dos títulos de División de manera consecutiva queda claro que no se puede simplemente descartar su capacidad. Pero de la misma manera queda claro que para dar el siguiente paso se tienen que tomar medidas fuertes para cambiar el rendimiento del cuadro ofensivo. Si todo comienza con O'Brien como ha confirmado, la decisión debe de ser fácil de tomar. El esquema se tiene que adaptar. No hay tiempo para esperar el desarrollo de un QB nuevo ya que el momento del cuadro defensivo es ahora mismo.

Enrique Vasquez, entra a su décimo quinta temporada en las transmisiones de los Texans. La temporada del 2016 será su quinta como la voz oficial en español de los Houston Texans y la temporada número 25 transmitiendo partidos de la NFL.

This article has been reproduced in a new format and may be missing content or contain faulty links. Please use the Contact Us link in our site footer to report an issue.
Advertising