Los triunfos en la pretemporada no alejan o acercan a un equipo a un Super Bowl pero las lesiones que se pueden sufrir durante partidos amistosos sí pueden comprometer las esperanzas de llegar a un campeonato.
Es natural que el aficionado quiera que su equipo gane todos los partidos, pero un cuerpo técnico siempre tiene que ser cauteloso y en lo que va de la pretemporada de los Texans Kubiak y su grupo de entrenadores han hecho un buen trabajo en el departamento de lesiones.
Quizás este año las decisiones de mantener a un jugador fuera de los partidos Kubiak puede tomarlas con mucha más confianza porque al fin y al cabo conoce bien a la gran mayoría de su plantel y sabe la capacidad de cada jugador.
Esto es una gran ventaja porque así no tiene que arriesgar a sus elementos demasiado y les puede dar a sus jugadores el tiempo para recuperarse al cien por ciento.
Sin embargo, el sábado contra los Saints el partido es peligroso porque no va a tener de otra más que arriesgar a sus titulares un poco más, así que a cruzar los dedos de que no suceda algo inesperado en cuanto a lesiones se refiere.
Si todos salen ilesos de este duelo contra New Orleans los Texans llegarán a septiembre con sus mejores jugadores listos para encarar la temporada.
Pero la pretemporada difícilmente perdona a los equipos: el 'nose tackle' Sunny Harris se va a perder toda la temporada y el titular en dicha posición, Shaun Cody, sigue sin poder recuperarse de sus dolores en la espalda.
Si todo marcha bien Cody podría estar listo para el inicio de temporada, pero no cabe duda que en la posición de 'nose tackle' los Texans no tienen profundidad y tendrán que hacer algo al respecto.
