Una temporada difícil para los Houston Texans y en particular para su quarterback titular David Carr, recibió otro gancho al hígado el domingo en lo que fue una de las peores derrotas que ha sufrido el equipo al caer contra los New England Patriots por marcador de 40-7 en el Gillette Stadium en Foxboro Massachusetts.
El partido inició mal para los Texans en su primera serie ofensiva. En cuarto down y una yarda desde su 42 propia y en formación de despeje intentaron sorprender con un acarreo de Jason Simmons quien se acercó al centro para tomar el balón, Al no conseguir el primer y diez, los Patriots tomaron el balón y en sólo siete jugadas encontraron la zona de anotación en acarreo de una yarda del corredor Kevin Faulk para tomar la ventaja 7-0 con 8:11 por jugar en el primer cuarto.
Esta sería la primera de siete series ofensivas que los Patriots iniciarían en territorio de los Texans en el partido. De hecho sus siguientes dos series iniciaron en la yarda 24 y 44 de los Texans debido a dos intercepciones lanzadas por Carr.
New England aprovechó estos dos robos de balón para anotar 10 puntos y aumentar su ventaja a 17-0 con 3:40 por jugar en el primer cuarto. La tarde no mejoró para Carr al lanzar dos intercepciones más y por primera vez en su carrera lanzó cuatro en un partido. Carr había entrado al encuentro con racha de 64 pases consecutivos sin intercepción.
En el segundo cuarto los Patriots agregaron 10 puntos más para aumentar su ventaja a 27-0 al medio tiempo. Fue una primera mitad en la cual los Texans lograron sólo 76 yardas ofensivas, permitieron cuatro capturas de QB y lograron sólo cuatro primeros y diez. Cualquier esperanza de remontar el marcador en la segunda mitad rápidamente se esfumó. Houston arrancó el tercer cuarto con el balón y lograron su mejor serie ofensiva del partido. Marcharon 70 yardas en 10 jugadas y el corredor Ron Dayne encontró la zona de anotación por tercera vez en dos partidos. Su acarreo de una yarda para TD acercó a los Texans 27-7 en el marcador pero en la patada de salida siguiente, los Patriots regresaron el balón 93 yardas para TD y la ventaja de 34-7.
El resto del partido se jugó por compromiso pero los Texans nunca armaron una amenaza mientras que los Patriots agregaron un par de goles de campo más.
En resumen, cuatro intercepciones, cuatro capturas de QB permitidas, permitieron una patada de kickoff para TD y debido a las intercepciones y patadas de despeje cortas y mala cobertura en los equipos especiales, los Patriots iniciaron siete de sus 14 series ofensivas en territorio de los Texans. Los 33 puntos de diferencia son la segunda más amplia diferencia en una derrota en la historia de los Texans.
Después del partido, tanto Carr como el entrenador en jefe Gary Kubiak, asumieron responsabilidad por la derrota. "Estoy cansado de perder," confesó Carr. "Si quieren pongan toda la culpa sobre mí. Quisiera que mis compañeros fueran reconocidos por lo fuerte que trabajan y que pudiéramos ganar aunque yo haga poco, pero ya estoy cansado de perder."
Kubiak por su parte no entiende los errores que se siguen viendo semana tras semana. "Son errores que no son aceptables y cometidos por jugadores que han jugado muchos partidos en la liga. De alguna manera tengo que encontrar y es mí responsabilidad encontrar la manera de eliminar estos errores."
Los Texans ahora les restan dos partidos en la temporada y los dos son en el Reliant Stadium. El domingo reciben a los Indianápolis Colts, equipo al que no han vencido en nueve partidos y cierran la temporada contra los Cleveland Browns.
Enrique Vasquez es comentarista en la Cadena de Radio en español de los Houston
Texans. Pueden sintonizar los partidos en Houston en KLAT 1010 AM, en San Antonio
en KXTN y en el Valle de Texas en KGBT.