El décimo triunfo que buscaba Bill O'Brien para esta temporada fue logrado por los Texans en la primera ronda de playoffs al dominar a los Raiders de Oakland 27-14. Tal como se anticipaba, la formula del triunfo fue un juego terrestre consistente, buen cuidado del balón y defensa sofocante que con presión constante forzó errores del QB de los Raiders. Una cosa es saber lo que se tiene que hacer para ganar. Los Texans tomaron las instrucciones y las ejecutaron a la perfección. Por lo tanto el equipo se ganó su boleto a la ronda de playoff Divisional para enfrentar a los temidos New England Patriots este próximo Sábado. El sueño de un tÃtulo aun está al alcance.
Ahora, los Texans no tienen en mente viajar al Gillette Stadium para ser sacrificados como las primeras vÃctimas de Tom Brady y el Hoodie en su camino al Super Bowl en Houston. Con la defensa número uno en la NFL los Texans tienen toda intención de complicarle la vida a los Patriots. Con un Jadeveon Clowney que ha encontrado un nivel que pocos en este deporte alcanzan, los Texans presentan una carta interesante. La clave sin duda es controlar, limitar y molestar a Tom Brady para poder ganar. Esto es algo que pocos han podido hacer especialmente ésta temporada. Pero si hay un coordinador defensivo que puede diseñar un plan de juego para lograr dicho propósito, Romeo Crennel es la persona. Este es su momento y más importante, en el plantel de los Texans, cuenta con los caballos para ganar la carrera.
Crennel tiene la tarea de encontrar el balance entre crear confusión para Brady y el desatar presión sin
descuidar la cancha. Brady, mejor que cualquier otro mariscal de campo que aun se encuentra en la post temporada, es un genio en lo que se refiere a anticipar presión y coberturas para degollar a una defensa.
Lo que le da una oportunidad a los Texans es que entran al partido con un cuadro defensivo completo. Claro al equipo les falta JJ Watt y Kevin Johnson y John Simon tres grandes jugadores que no sólo rellenan la lista de titulares pero que son jugadores capaces de hacer jugadas de impacto. Pero este cuadro defensivo es completo en el aspecto que en cada lÃnea aun tienen no sólo uno si no varios jugadores que pueden hacer jugadas que cambian partidos. Todo inicia con Clowney que exige doble marca y aun asà no es garantÃa que no va a hacer la jugada. Tiene la velocidad para alcanzar corredores y receptores y la potencia para descartar bloqueadores como si fueran de papel. Clowney puede de maner a individual hechár a perder el ataque ofensivo de los Patriots. Pero a diferencia de temporadas pasadas cuando se trataba de JJ Watt y otros 10 jugadores, Clowney no lo tiene que hacer sólo.
Los Texans cuentan con jugadores en cada lÃnea que han marcado diferencia en partidos a lo largo de la temporada y todo inicia en las trincheras. Especialmente en trabajo de sacrificio en contra del juego terrestre jugadores como Vince Wilfork, DJ Reader y Chris Covington en la lÃnea de golpeo. Estos jugadores absorben bloqueadores y logran penetración detrás de la lÃnea que le abre el camino al lÃder de tacleos del equipo Benardrick McKinney en la posición de LB. Entre los apoyadores por su puesto se encuentra Whitney Mercilus quien sin duda marca la pauta con jugadas de impacto. Pero también destaca el veterano Brian Cushing quien ha sido consistente en el centro de la cancha y en las últimas semanas también ha contribuido con jugadas detrás de la lÃnea de golpeo.
En la defensiva secundaria los veteranos Jonathan Joseph y Kareem Jackson han mantenido un nivel estupendo pero la incorporación de AJ Bouye y la manera que ha jugado durante toda la temporada le da a los Texans tres esquineros que pueden limitar a los mejores tres receptores de cualquier equipo. Esta capacidad aunado a la presión sofocante que el equipo de los Texans puede causarle muchos problemas a
cualquier QB.
Lo que también distingue a los Texans es el hecho de que son especialistas en generar presión por el centro de la cancha. Es decir al atacar el espacio a cada lado del centro, la presión es inmediata y fuerza al QB a salir de la bolsa de protección. Brady es un estupendo mariscal pero su especialidad no es lanzar el balón en movimiento. Cuando la presión llega de los costados puede dar un paso hacia adelante o atrás pero cuando la presión llega del centro es una cosa muy distinta.
Se dice que las defensas ganan campeonatos. Esto es cierto siempre en cuando los acompañe un ataque ofensivo que aproveche oportunidades. Contra los Raiders, Clowney le presentó la primera oportunidad con su intercepción espectacular y en la siguiente jugada no perdonaron y cobraron el primero de tres robos de balón al encontrar la zona de anotación en el acarreo de Lamar Miller para TD. Los Texans anotaron sólo 25 TD's en toda la temporada regular y en la zona roja fueron un desastre. Pero en contra de los Raiders cobraron cada oportunidad en la zona roja con un TD y lo hicieron por el aire con DeAndre Hopkins y por tierra con Miller y en una excelente jugada de opción de pase o correr con Brock Osweiler en acarreo de TD. El equipo ofensivo movió el balón por aire y por tierra y más importante lo cuido. Con ventaja de 20-7 al medio tiempo la segunda mitad se trato de simplemente fundir el reloj y no arriesgar y los Raiders en ningún momento presentaron una amenaza. La ofensiva corrió para 123 yardas, encontró jugadas importantes en su juego aéreo con las alas cerradas y con el novato Will Fuller y más importante con Hopkins.
Osweiler, jugando en un partido de gran presión respondió y demostró gran carácter. La ofensiva hizo algo que sólo dos equipos lograron a lo largo de la temporada en contra de los Raiders. Anotar por lo menos 27 puntos. De hecho sólo Carolina le anotó más, 32, pero eso fue en derrota al caer en contra de Oakland 35-32. Por lo tanto el trabajo del cuadro ofensivo sobre los Raiders sin duda es de buen mérito. Y dicho esfuerzo se da en buen momento.
Claro, los Patriots no son los Raiders. El Gillette Stadium en Foxborough no ha sido un lugar cómodo para los Texans en sus previas cuatro visitas al perder en contra de New England por un marcador combinado de 171-79, incluyendo una derrota de 27-0 en la fecha tres de esta temporada. Pero queda claro que en este momento los Texans son un equipo muy distinto en ambos lados del balón a ese equipo que fue blanqueado en Septiembre. Ese equipo que inicio el primer cuarto de la temporada con récord de 3-1, la derrota siendo vs los Pats, es un equipo muy distinto e inferior al que visitará a Brady y compañÃa éste Sábado.
Nadie considera que los Texans tienen una oportunidad de sacar el triunfo. De la misma manera nadie se hubiera imaginado que con todos los problemas que el equipo enfrentó a lo largo de la temporada debido a lesiones y bajo rendimiento que el equipo se encontrarÃa en esta situación. Con un puesto entre los ocho finalistas en la NFL y la oportunidad de continuar en la pelea. El sueño de poder ser el primer equipo en la historia de la NFL en jugar un Super Bowl en su propia casa, aun está al alcance.
Enrique Vasquez, entra a su décimo quinta temporada en las transmisiones de los Texans. La temporada del 2016 será su quinta como la voz oficial en español de los Houston Texans y la temporada número 25 transmitiendo partidos de la NFL.